OVARIOS POLIQUISTICOS (SOP)

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En este mes de Febrero continuamos con nuestro compromiso de haceros llegar información sobre temas relacionados con la salud. Este mes vamos a informaros sobre un tema muy interesante y que cada vez más afecta a la población femenina, que no es otro que el Síndrome de los ovarios poliquísticos (SOP).

 

El SOP ocurre cuando los ovarios o las glándulas suprarrenales femeninas, producen más hormonas masculinas de lo normal. Es un desorden que se calcula afecta un 6-10% de la población de mujeres.

Hasta hace apenas unos años, no era mucho lo que se conocía acerca de este desarreglo hormonal, y muchas mujeres no encontraban ningún tipo de respuesta a ciertos síntomas que experimentaban. Síntomas relacionados con alteraciones metabólicas, como por ejemplo; aumento repentino de peso especialmente en la parte superior del tronco, exceso de vello en el cuerpo (cara, brazos, piernas, etc) acné, depresión y cambios de estado de ánimo, calvicie, infertilidad.

Hoy en día aún no podemos identificar a ciencia cierta el origen de este desarreglo, ya que hay un 30-40% de casos en los que se conoce la existencia del factor hereditario de madres de pacientes que también lo padecieron. Pero lo que sí que hemos comprendido, es que es un desorden endocrino, y que en muchas mujeres (50 a 90%) afectadas, hay un aumento en la insulina, llevando a las alteraciones metabólicas que se manifiestan como aumento de peso y adiposidad. Por lo que el tratamiento nutricional puede ser calve en la resolución de muchos síntomas.

Uno de los principales problemas con los que se encuentran los especialistas a la hora de diagnosticarlo y tratarlo, es que no todas las mujeres presentan los mismo síntomas y con la misma severidad. Este es un síndrome metabólico que no afecta solamente el ovario. Por lo tanto el especialista debe de conocer bien la historia clínica de la paciente, realizar una exploración buscando los signos del SOP, un estudio hormonal y una ecografía de ovarios para poder así llegar a un diagnóstico.

Los principales síntomas pueden ser varios. Nosotros aquí los vamos a dividir en reproductivos, nutricionales, emocionales y dermatológicos.

REPRODUCTIVOS

–          Ciclos menstruales irregulares

–          Sangrados vaginales anormales

–          Infertilidad

NUTRICIONALES

–          Aumento de peso rápido y repentino, especialmente en la parte superior del tronco.

–          Resistencia a la insulina, diabetes.

–          Hiperlipidemia (exceso de grasas en sangre)

EMOCIONALES

–          Depresión

–          Ansiedad

–          Cambios fuertes en el estado de ánimo

DERMATOLOGICOS

–          Hirsutismo (exceso de vello corporal)

–          Problemas de la piel: acné

–          Alergias

–          Calvicie androgénica (provocada por la acción de la hormonas masculinas)

A la hora de realizar el tratamiento a las pacientes que sufren de síndrome de ovarios poliquísticos se busca resolver los distintos problemas que este pueda ocasionar. Nosotros aquí en este artículo nos vamos a centrar solamente en el tratamiento nutricional que es el campo en el que nos desenvolvemos en nuestro centro.

Entre el 50 – 90% de las mujeres que padecen de SOP, se conoce que padecen de resistencia a la insulina. Recordaros que la insulina es la hormona encargada de transportar el azúcar en sangre hacia las células donde se utiliza como energía. La resistencia a la insulina, se da cuando cantidades normales de esta hormona no son suficientes para lograr el transporte de azúcar hacia el interior de las células, entonces estas se vuelven perezosas y no responden al estímulo normal. A consecuencia de esto se debe de aumentar los niveles de insulina en el cuerpo, lo que nos lleva a:

–          Acumulación del exceso de calorías en forma de grasa, especialmente en la región abdominal.

–          Aumento de triglicéridos en sangre.

–          Mayor ansiedad y alteraciones en el estado de ánimo.

–          Puede experimentar constante sensación de hambre y necesidad de carbohidratos

–          Se puede llegar a desarrollar diabetes del tipo 2.

 

 

Está demostrado que en las mujeres que presentan resistencia a la insulina, el control de niveles de insulina a través de la alimentación y/o medicamentos, incluso sin una pérdida de peso consecuente, puede ayudar a restaurar la función ovulatoria, la ciclicidad menstrual y los niveles de fertilidad, así como el estado de ánimo ayudando a controlar la ansiedad y la depresión.

Las pautas más importantes que se deben de seguir en la alimentación para controlar los niveles de insulina son:

1.- Mantener horarios regulares de comida. (no es recomendable pasar más de 4 horas sin comer, ya que favoreceremos la descompensación de los niveles de azúcar en sangre y por lo tanto también los de insulina).

2.- Consumo adecuado de proteína baja en grasa. ( la proteína baja en grasa ayudará a sentirnos más saciados, controlando así mejor el apetito. Alimentos con proteína baja en grasa, son: pollo y pavo sin piel, pescado, atún y mariscos, leche descremada y derivados).

3.- Consumo de alimentos de baja carga glicémica. ( para no complicaros la vida en que alimentos son de baja, media o alta carga glicémica o aconsejamos seguir esta regla básica. SIEMPRE QUE SEA POSIBLE REEMPLAZAR LAS HARINAS REFINADAS Y ALIMENTOS ALTOS EN AZUCAR POR HARINAS INTEGRALES LEGUMINOSAS Y VEGETALES NO HARINOSOS.

Aunque lo ideal sería visitar a un especialista en nutrición o entrenador personal, que os preparara una dieta totalmente individualizada para controlar correctamente los niveles de azúcar en sangre y un correcto plan de trabajo físico en arreglo a vuestras posibilidades que os ayude a bajar de peso y evitar así los estancamientos o la recuperación rápida de peso que se producen en dietas que no van acompañadas de un plan de trabajo físico controlado y adecuado a cada persona.